Dejamos vuestra alimentación en manos de un especialista. Nos ocupamos y nos preocupamos de que todo esté optimizado y acorde a las necesidades de cada persona. Por ello tendrás un primer contacto dónde por medio de una anamnesis podremos saber todo lo necesario sobre ti y adaptarlo a tu situación.
El objetivo principal de este servicio es mantener y/o mejorar el estado nutricional, la salud y la calidad de vida de la persona con enfermedad renal o trasplante de órgano sólido o médula. También nos enfocamos en educar nutricionalmente y saber elegir en el día a día con certeza qué es lo óptimo para vosotros, sin preocupaciones y sin miedo, para que a medio-largo plazo tengáis todas las herramientas para ser autónomos con vuestra alimentación.
Algo a tener en cuenta en el servicio de nutrición es el seguimiento. Como sabemos cada patología tiene su dinamismo y por lo tanto hay que saber adaptar la nutrición en cada momento, ya que es lo que marcará la diferencia en cuanto a calidad.
Por ello, tendrás contacto permanente de manera bidireccional con nuestro dietista, con revisiones semanales y con variadas formas de medir tu progreso en todos los aspectos. Estamos en contacto diario contigo para que mejores lo máximo posible.